En los últimos meses, el mercado de libros en Argentina ha experimentado una drástica caída en las ventas, resultado directo de la severa crisis económica que afecta al país. La inflación más alta del mundo y la devaluación de la moneda han vaciado los bolsillos de los argentinos, haciendo que la compra de libros se vuelva cada vez más inaccesible para el ciudadano promedio.
Disminución de las Ventas
En enero de 2024, las ventas de libros en Argentina cayeron en torno al 30%, y se estima que el descenso para febrero podría ser aún mayor. Gustavo López, editor en Ediciones Lux, describe la situación como desastrosa: “Los últimos meses han sido pésimos para el sector. Las ventas han caído de manera tremenda y los costos de producción se han multiplicado”. López señala que en la última feria del libro, la venta no alcanzó ni los 60 ejemplares, comparado con los 200 que usualmente se venden.
Por su parte, Juan Manuel Pampín, presidente de la Cámara Argentina del Libro (CAL), confirma que la caída en las ventas en enero fue del 30%, y anticipa una tendencia aún más negativa. La crisis económica ha puesto a la industria del libro en una posición precaria, donde se considera una de las últimas prioridades de los ciudadanos, detrás de necesidades básicas como comida y servicios.
Impacto en las Librerías
Las grandes cadenas como Cúspide también han visto una caída en las ventas, con una disminución del 18% en enero en comparación con el año anterior. En librerías independientes como Céspedes, la caída interanual fue del 30% en enero y se prevé que sea del 45% en febrero. Cecilia Fanti, dueña de Céspedes, atribuye esta disminución al ajuste económico del gobierno y a la falta de interés en políticas culturales.
Precios de los Libros y Poder Adquisitivo
El precio promedio de un libro en Argentina ronda los 15.000 pesos (unos 16,5 euros), y una novela de 600 páginas puede costar hasta 30.000 pesos. Esto pone a los libros fuera del alcance de muchas personas, especialmente comparado con otros países. Un salario mínimo en Argentina permite comprar solo 13 libros, mientras que en España, con un salario mínimo, se podrían adquirir 63. En México, el salario mínimo permite comprar 28 libros.
Carlos Díaz, director editorial de Siglo XXI, señala que el precio de los libros sigue siendo alto, aunque no tanto como el costo real de producción. La inflación y el aumento de los costos del papel han llevado a los precios a niveles inalcanzables para muchos argentinos.
El Futuro del Sector Editorial
La Feria del Libro de Buenos Aires, programada entre el 23 de abril y el 13 de mayo, será una prueba crucial para la industria. Los editores están ajustando sus estrategias, reduciendo tiradas y posponiendo publicaciones arriesgadas. Las librerías están buscando alternativas, como convenios con bancos para ofrecer opciones de pago a los clientes.
Además, el sector editorial enfrenta otro desafío con la propuesta de ley enviada por el Gobierno de Javier Milei, que buscaba eliminar la Ley de Defensa de la Actividad Librera. Aunque el proyecto fracasó en el Congreso, el rechazo unánime del sector destaca la preocupación por el futuro de la industria.
Reflexiones Finales
La crisis económica ha golpeado duramente al mercado de libros en Argentina, reduciendo significativamente las ventas y haciendo que los libros sean un lujo para muchos. A pesar de la difícil situación, algunos libreros y editores siguen apostando por el futuro del sector con optimismo y creatividad. Sin embargo, la falta de políticas consistentes para fomentar la lectura y el apoyo a la industria cultural podrían poner en riesgo la rica tradición literaria del país.